ntes los esclavos eran los trabajadores y los mantenían cautivos por medio del miedo. Ahora los esclavos son los consumidores y los mantienen cautivos con la publicidad. En la Matrix se trabaja por la fuerza, no por gusto ni vocación. A los reos de esa cárcel les inculcan necesidades que no necesitan y luego se las incrementan hasta convertirlas en “artículos de primera necesidad”. Los internos de la Matrix se pasan la vida trabajando en temas que no son de su interés a cambio de dinero para comprar lo que le han dicho que necesitan y para cumplir con las metas que ella misma les pone. El premio y el castigo suceden a dentro de la Matrix. El castigo es el trabajo para lograr el premio, y el premio es un producto o servicio de la Matrix. Pero no es para tanto. No lo tome así. Porque la Matrix da vacaciones para que usted pueda ir y dedicarse a hacer todo lo que le han dicho que le gusta.

                             El sistema capitalista se mete como intermediario entre el hombre y su trabajo, se lo quita y luego se lo cobra. Carl Marx.

A los reos de La Matrix les comen el corazón y el cerebro y los convierten en consumidores compulsivos a control remoto. A la Matrix se ingresa desde niño. La puerta es el kiosco y la ceremonia de ingreso consiste en llorar ahí. De esa manera, el niño manifiesta su rendición corporal y espiritual a la Matrix. Toda su vida va a llorar de alguna manera por ese mismo motivo. Luego, en la escuela primaria lo van a entrenar para dedicar su vida a hacer cosas que nada tienen que ver con sus anhelos y aspiraciones, ni siquiera con su curiosidad. Que además deben ser aburridas, repetitivas y complicadas. Esto es para que nada en su vida brille más que la belleza de los cero kilómetros, los artefactos, el pasto corto y las etiquetas

La Matrix cuenta con un formidable sistema de programación de almas. No solo la publicidad pagada. Todos somos agentes promotores de la Matrix mostrando la indumentaria, ostentando con el automóvil, bebiendo pintura en botella plástica a la vista de otros. Toda nuestra conducta es un sketch publicitario y la conducta de los que nos rodean también. El Mundo en que vivimos es un campo de adoctrinamiento. Todos hemos venido al Mundo para algo. Los motivos son muy diversos, unos vienen para tener hijos y nietos y para ser útiles a ellos y a los tataranietos. Otros han venido para innovar en el arte, oficio, profesión, comercio, religión, ciencia, literatura. Los más abundantes son los que han venido por razones que están lejos del alcance de nuestra comprensión, de la comprensión de las ciencias, de la historia y de la propia Matrix. Muchos de ellos, y de nosotros pasamos por la vida sin llegar a saber para qué vinimos. Las señales de muestra misión son tenues y es difícil diferenciarlas del ruido interior. Pero saberlo es suficiente para la vida (si quieres saberlo).

La Matrix es como una religión. Mirar los productos de las vidrieras es la misa y pensar en ellos es la oración. Los templos son los shopings y la peregrinación a los lugares sagrados son las vacaciones. Los devotos de este culto son fanáticos fundamentalistas, no son capaces de salir de un comercio sin bolsa plástica alguna. Son culpables de 95% del Cambio Climático y del 100% de las 6 Islas de Basura de los 5 océanos. Usted lector me va a decir que la culpa es de las empresas contaminantes y yo le digo no, que el culpable es usted en el momento en que está frente a un kiosco o una góndola de supermercado. No es delito ecológico fabricar, comerciar o tirar envoltorios y botellas plásticas, el delito es comprarlas. El delito se comete en la góndola, no en los basurales ni en las fabricas. Cuando está frente a la góndola, a usted le mueven la mano a control remoto. Si usted de apodera de su mano y la mueve, de acuerdo a su conveniencia y la conveniencia del Planeta, usted, en ese momento está afuera de la Matrix. Las fabricas y los comercios no son inmorales. Ellos son fuerzas naturales que se dedican a lo que se vende y ellos cambian todo si cambian las ventas. Inmoral soy yo cuando estoy comprando.

Las Jerarquías.

En la Matrix hay jerarquías. Están los que no llegan a fin de mes con el sueldo y nunca se les ocurre dejar de comer basura cara y de beber pintura cara, de comprar artículos de limpieza y ropa de marca. Están los que piden en la calle para comprar pintura carísima y alimentarse en el kiosco a no menos de $150 el kilogramo. Si usted no sabe distinguir entre lo que es comida y basura, sepa que todo lo que es basura tiene envoltorio plástico y si tiene alguna duda mire el precio.

                     Si quieres saber quien te domina mira lo que comes. Bill    Mollison. Si quieres saber quien te domina mira en qué gasta y cuanto. Yo… Usted va a decir que le copié la idea. Bueno, sí. Como todos mis libros.

En un escalón superior está el comerciante que gana más y tiene acceso a placeres más elevados adentro de La Matrix, digo automóvil y vacaciones. Este se cree mas libre que sus clientes. pero es esclavo de Fiat, Volkswagen, Chevrolet. La mayor parte de lo que recauda es para alguna automotriz y para turismo. El comerciante realiza el trabajo sucio de robar a los clientes y a los empleados, pero el dinero no es para él. Usted va a pensar que, a diferencia de sus clientes, nuestro comerciante es más libre y feliz, pero no, sufre tanto como el que pide en la calle porque necesita urgente hacerse esclavo de BMW, Toyota o algo así. Y si lo logra va a soñar con hacerse esclavo de Ferrari.

Más arriba están los mayoristas, lo políticos, las grades empresas. Estos explotan a los minoristas hasta reducirlos a empleados sin sindicato. Pero son tan esclavos como ellos porque creen en los mismos valores. Están adoctrinados por su propia predica. Igual que aquel niño que llora en el kiosko. También trabajan para otros. y en vez de hacer algo, prefieren que se lo haga otra empresa, porque ellos también creen en las misteriosas bondades de las empresas privadas. Están tan necesitados como el empleado que que no llega a fin de mes y compensan la amargura de la vida con el sabor a felicidad de la gaseosa, igual que aquel que pide en la calle. Si usted se entera de lo que están haciendo los más ricos del Mundo verá que están tratando de conseguir más dinero y están más apurados que los comerciantes y más necesitados que el que pide en la calle. Los programadores de almas son víctimas de sus propios programas, no saben que hacen lo que están haciendo y sufren igual que el que pide en la calle y también ellos compensan todo con una botella de felicidad..

Historia.

El sistema capitalista Nació con la Revolución Industrial y eso cambió el Mundo. Hasta entonces estaban los nobles y los plebeyos, los bastardos. A partir de entonces estaban los nobles, los plebeyos ricos (los snov) y los plebeyos pobres. Con el tiempo, los artesanos ricos se hicieron los dueños del Mundo. El año 1960 fue la cúspide del Sistema Capitalista, del Sueño Americano. Este sueño comenzó con el discurso de Tomas Jefferson del 4 de marzo de 1801. Donde dice algo así como que “todo ser humano tiene derecho a la felicidad” entienda felicidad como el sueño americano” http://www.auroradechile.cl/newtenberg/681/article-3110.html Por eso EE UU sale con portaviones a llevar felicidad al Mundo. El sueño americano se puede representar con la nevera, el Chevrolet Impala 1959, la pasta dentrífica y la revista Mecánica Popular.

Los que viven en la Matrix no están presos, están cautivados. La Matrix les escribe todos los deseos, convicciones, proyectos, ilusiones y anhelos. No se los escriben en el cerebro ni en le corazón. Se lo escriben en la piel. Cuando yo veo la propaganda de un automóvil me da risa. ¿Se creen que con esos argumentos sonsos me van a convencer a mí? Pero el propósito de ellos no es convencer, es dejar en mi piel sensaciones y deseos que convierten a ese automóvil en una necesidad primaria. Yo me río de esa propaganda pero necesito ese automóvil con toda mi piel.

La frontera de la Matrix es mi propia piel.

También en mi piel han escrito que mi basura no contamina el planeta porque es poca. Mi cerebro dice que si todos pensamos así es mucha la basura. Pero mi piel responde que ese es un problema de todos, no un problema mío.

Historia de la Matrix.

A la matrix la inventó Aldous Huxley. Él escribió “Un Mundo Feliz” con la intención de que todos lo veamos y lo evitemos, pero eso le encantó a los poderosos y les sirvió de inspiración. La “corporación” del libro “Un mundo Feiz” está vigente. Es una enorme cantidad de empresas que no tienen conciencia de que son una corporación pero actúan como tal. El gobierno central no es un grupo de pensadores sino una multitud de empresas publicitarias y encuestadoras. En la época de Huxley no existía la organización en red. El “soma” de Huxley es la Coca Cola y hoy hay una multitud de pinturas bebibles. La guerra de las corporaciones fue entre los que nos robaron el agua y los alimentos y por otro lado todos los pueblos y gobiernos del Mundo que fueron vencidos antes de darse cuenta de que se venía esa clase de guerra y antes de saber cómo era. Y contra una multitud de ecologistas como yo que todavía no sabemos lo que quiere la Matrix y lo que queremos nosotros. Los primeros prisioneros fueron los gobiernos. Las municiones de la Matrix son microships que colocan en los cuerpos de millones de personas para que piensen por ellas según la conveniencia de la Matrix.

Los microchips de la Matrix.

La dominación de los pueblos se consigue con las guerras, pero no lamamos guerra solo al campo de batalla o al hecho armado no convencional, Detrás de las guerras están las intenciones. Está la intención de dominar o de no dejarse invadir o la de liberarse de la dominación. Jamás se vence al enemigo si este no abandona su ilusión de liberarse o de dominar. El libro “Mi Lucha” de Adolf Hitler habla muy poco de judíos. En síntesis, lo que dice es muy simple: -La raza aria es superior y todos los pueblos deben ser sus sirvientes.- El nazismo fue para los nacis una esperanza, una ilusión, que los rusos se encargaron de borrar. Si el fin del nazismo hubiera sido el suicidio y la capitulación, hubiéramos tenido una tercera, cuarta y quinta guerra mundial. El fin del nazismo fue la perdida de una esperanza. Y como dice la gente: La esperanza es lo último que se pierde.

Las verdaderas guerras son de intenciones. Silo

La tercera guerra mundial fue con armas invisibles y sofisticadas que no conozco, apenas deduzco por sus resultados. Nos robaron el agua, no a los argentinos, a todo el Mundo. A los países poderosos y a los pobres, a los más ricos y a los más pobres de cada país. Ellos le ponen botella al agua y nos la venden a precios humillantes, como agua o como pintura bebible. Vemos botellas de pintura en la mesa de las películas de ricos, en la mesa de conferencias internacionales en las villas del África y de los esquimales, en los que comen en el suelo. Así como el agua nos han robado los alimentos. Los envuelven en plástico y nos lo venden a precios humillantes. Vea la diferencia de precio por Kg entre el pan de panadería y las galletas con envoltorio plástico, entre la papa y la papa congelada, que consume gran cantidad de energía en frío, y que además, la papa envasada es transgénica y produce una sensación como de empacho a pocos minutos de haberla comido, y a largo plazo lesiones intestinales y problemas reproductivos.

http://chilebio.cl/blog/?p=99

También nos venden alimentos artificiales no producidos por plantas ni animales. El primer alimento artificial fue el Carboximetilcelulosa, una masilla plástica que apareció en el comercio como mayonesa. Luego se empezó vender como mostaza, Ketchup, Salsa Golf y aparecieron los helados de palito y tasita de vendedores ambulantes. Estos helados conquistaron a todos los kioscos y ahora casi todas las heladerías. Los colores, olores y sabores de todos los alimentos envasados los fabrican dos laboratorios suizos que tienen sus fabricas en Quwauit porque son a base de petróleo, mejor dicho se hacen con monómeros de plástico parcialmente quemados con catalizadores, algunos de ellos son radiactivos y la mayoría son tóxicos. Lo que no es masilla plástica es derivado de la soja transgénica. Lo que venden como chocolate es soja transgénica con color, olor, sabor y consistencia artificial.

Los productos de la Matrix.

El ideal del Sistema es producir al menor costo posible y luego vender al mayor precio posible. La utilidad, la calidad y la salud no importan, para compensar la baja calidad está la publicidad, cuanto más inútil o malo sea un producto tanto más hay que gastar en publicidad.

Por encima de todo. Hay una preferencia por lo artificial. Usted pensará que el comprador va a preferir siempre lo natural. Pero no, todos eligen el producto con etiqueta, con envoltorio plástico. En el supermercado de mi barrio ponen manzanas en bandeja plástica envuelta en polietileno tenso, brilloso y liso, con formas redondeadas que evocan el capot de un cero kiómetro y en cada manzana una etiqueta autoadhesiva para que parezca un repuesto de automóvil. Además vienen barnizadas y lustradas, con un barniz que les impide respirar, las manzanas son seres vivos y en pocos días sin respirar se ponen blandas y marrones por dentro y son atacadas por hongos, hongos incapaces de comer frutas vivas.

La gente quiere consumir los artículos de la industria. Frid Schumacher (década del 60)

Nadie escapa de la Matrix.

Si esta fuera una ideología cono cualquier otra, habrían detractores andando por ahí. Lo que pasa es que al ser compuesta de sensaciones corporales, uno la identifica como el propio yo. Todo lo que yo haga contra ella lo hago contra mí. Yo soy yo con todos mis defectos y dejar de ser yo es morir. Es difícil admitir que yo no soy el yo que vino a este Mundo para algo o para nada, y admitir que yo soy el yo que me implantaron de niño cuando lloraba en el kiosco.

La Matrix Avanza.

Los primeros plásticos que vinieron a reemplazar productos naturales eran hule, caucho, baquelita. Estos se hacían con productos naturales pero eso no importa, porque una vez sintetizados* pasaban a ser inmunes a la descomposición, pero todavía eran quemables. Luego llegaron los plásticos tóxicos que no se pueden quemar porque contienen cloro y producen dioxina, que es cancerígena y mutagénica y se acumula en la naturaleza. Estos son PVC. Formaldehido. PCB, Teflón y otros. Por culpa de estos plásticos no se pueden quemar la basura de las ciudades. La quema de basura no produce smog si se realiza en hornos de doble combustión, y si no contiene basura orgánica es posible producir energía eléctrica con ella.

Lo creadores del plástico no pensaron en nada que no sea en las ganancias. Por eso hoy no es posible resolver el problema de la basura plástica, que es el único problema, porque la basura orgánica, mal que mal, con todo su olor y molestias, a largo plazo termina siendo tierra. La Matrix no está compuesta por productores de porotos o tomates, es una cadena de productores de Tetrabrick, bandejas y botellas plásticas, envoltorios plásticos y todos los alimentos artificiales que vienen envueltos en plástico, todo lo que es limpieza y perfumería**. Vaya al supermercado y mire: todo lo que tiene envoltorio plástico y la cadena de frío es la Matrix.

La Matrix no para de avanzar. Desde el hule hasta los plásticos de hoy. Antes las herramientas tenían mago de madera, de a poco se fueron viendo cada vez más mangos plásticos, luego vinieron las fundas aislantes de las pinzas. Ya no se podía comprar una pinza sin pagar ese impuesto a la Matrix. Un día voy a comprar una pinza, resignado a pagar por una funda plástica que no necesito y me encuentro con un nuevo impuesto. Todas las herramienta vienen en Blister de pástico, y si no compro blister no hay herramienta. Ahora hay martillos con mango plástico llaves inglesas con mango de plástico y todo en blister. Además no salga de la ferretería sin su correspondiente bolsa plástica descartable. Me han ofrecido bolsa en una ferretería por dos tornillos, en una librería por una lapicera, en otra librería por dos fotocopias. Es obsceno salir a la calle con el tornillo en la mano. Yo me muero de vergüenza ahí mismo si la gente me mira el tornillo.

La ropa cada vez es más artificial. Cuando yo era niño, una vecina dijo –Hasta los zapatos van a venir de plástico- (plena década del 50). Unos años años más tarde no había un casa en mi berro de Godoy Cruz que no tuviera flores de plástico. La ropa sintética impide la respiración de la piel y con eso aparecen olores desconocidos y desagradables, de inmediato, el Sistema Capitalista promocionó la venta de perfumes, aromas que, mientras duran, tapan el olor, la ropa cada vez más sintética, los perfumen no alcanzan, inventan el desodorante, con aroma más fuerte y persistente. Empieza a venir ropa del todo sintética, tienen que inventar los anti transpirantes. Estos no son para tapar con el olor sino para impedir del todo la respiración del cuerpo. Proliferan todas las enfermedades de la piel que son causadas por la falta de oxígeno (todas) Dicen que los anti transpirantes producen cáncer de mamas, sin embargo, estos no tienen sustancias cancerígenas, lo que pasa es que impiden la exudación de sustancias cancerígenas del cuerpo que normalmente son expulsadas.

La Matrix sigue avanzando, inventa el “Cuero Ecológico” Este sí que aporta sustancias cancerígenas y mutagénicas porque está echo de vinilo, un derivado del PVC. Todos saben que el PVC produce dioxina al quemarlo. Se incendia su casa o su auto con cuero ecológico adentro y reparte dioxina por todo el barrio o el campo donde esté, causando aborto espontáneo, cáncer y malformaciones genéticas a vecinos y animales. Y si no se quema el cuero ecológico, igual va produciendo dioxina por una descomposición lenta que se va avanzando bajo efecto de la luz. La 6 islas de basura de los océanos no solo tienen envases, gran parte es tela, cuero y piel sintética. La Matrix no para de avanzar. Hoy en la mesa de todo restaurante de Buenos Aires hay un primoroso mantel de cuero ecológico para que los comensales tengan un encuentro cercano con el PVC en cada comida.

Con la piel y el cuero ecológicos vino la doctrina de la piedad por los animales. Doctrina promovida y financiada por los fabricantes de plásticos. Como toda doctrina que viene de ese lado, son pensamientos histéricos, paranoicos y especialmente totalitarios, como todas las doctrinas creadas por la CIA y por empresas de su entorno. Una vez me dieron un volante donde decía que era criminal comer carne, huevo, leche, usar prendas de cuero y lana. Según he visto, las ovejas salen de la esquila frescas y contentas y dando saltos de alegría. El cuero es un desperdicio de la industria de la carne. Los tapados de piel contribuyen con a conservación de la especie. La chinchilla está extinguida, no las hay sino en criaderos. Si usted deja de usar pieles de chinchilla desaparecen las últimas que quedan. Si yo fuera chinchilla y me dieran a elegir entre preservar la especie para siempre o extinguirme en libertad, yo chinchilla, sin pensar, firmaría cualquier cosa que diga “preservar la especie”.

Sea piadoso use chinchilla.

Las gallinas criadas naturalmente, saben que sus huevos son necesarios para la familia y se sienten útiles y cacarean con orgullo después de cada postura, y si uno no va corriendo de inmediato a buscar su obra, y se la lleva con voces de agradecimiento, se sienten heridas en su orgullo de gallina, algunas se ponen furiosas y hasta rompen su propio huevo. Para que esa gallina deje de romper, basta con que se le agradezca desde la cocina cada vez que cacarea.

Las vacas saben que su leche es necesaria y tienen su orgullo vacuno. Lo mejor para ellas es que las ordeñen a mano y le digan alguna palabra. Si las ordeñan a máquina también saben que su leche es útil, una palmada, una palabra les hace bien.

Matar para comer no es criminal. Si yo mato una víbora me siento criminal, pero si la como no me queda ninguna culpa, aunque la aya matado por otro motivo. En mi moral es pecado matar si no es para comer. Jamás participaría de la pesca deportiva si lo pescado no va a ser comido por mí o por alguien. Si yo pesco y tiro al agua me siento culpable. La moral de vegetarianos y veganos es distinta. Para ellos es pecado comer carne, aunque no la hayan matado ellos mismos. Ellos tienen una moral más elevada que la mía, incluso, más elevada que la moral de la Naturaleza o la moral de Dios. Todos sabemos que Dios hizo un mundo violento e injusto, donde unos seres matan a otros y se los comen. A mí no me gusta eso, pero supongo que tiene una explicación moral que no está al alcance de mi inteligencia. La moral de veganos y vegetarianos está por encima de la de Dios. Ellos son mejores y más piadosos. También sostienen que la carne es mala para la salud humana, porque suponen que la creación está mal hecha y la “toxina” de la carne es uno de sus errores. En la mesa de los veganos no hay carne porque es tóxica, pero hay botellas plásticas con agua saborisada con aromas de Golfo. Que tiene tres antibióticos, además de aspartamo, ciclamato, benzoato, además de color, olor y sabor artificial. Esa agua tiene más química que la carne de una vaca internada en terapia intensiva.

http://mejorconsalud.com/como-hacer-aguas-saborizadas-caseras/

Sostienen además una cosa que es del todo permacultural: Dicen que no es moral comer carne porque para producirla hace falta 10 veces más superficie de tierra que para producir vegetales. Este razonamiento es lógico del todo, los permacultores debemos anotarlo y usarlo. ¿Cuanta es la cantidad mínima indispensable de carne, huevo o pescado para la salud humana? ½ Kg por semana para niños y 30g por semana para adultos. Pero los ecosistemas equilibrados dan más que eso. Estimo 1Kg por semana para todas las edades. Entonces yo me pregunto ¿Cual es la cantidad moral de carne en la Permacultura? Se me ocurre cualquiera dentro de esos límites.

Dicen que el ser humano no está hecho para comer carne. Pero según los libros de antropología. De lo cuatro millones de años (4km.) los humanos comían carroña y se pasaban el día corriendo en dos patas para seguir a los buitres. Recién hace 17.000 años (17cm.) dominó el fuego y pasó a comer carne quemada. Cuando tenían hambre iniciaban un incendio de 4Has o de 4.000.000has. (Según Antonio Elio Brailovsky eso cambió todo el paisaje del Planeta). Recién hace 4.000 años (4mm.) el hombre comenzó a comer vegetales de sus propios cultivos.

Siempre hubo vegetarianos y siempre fueron totalitarios (para bien o para mal), pero la doctrina fundamentalista de ahora es un microchip que nos pusieron los fabricantes de ropa sintética. Ser carnívoro o vegetariano nada tiene que ver con la Matrix, pero tener en la mesa una botella plástica de pintura plástica sí.

Para salir de la Matrix no hace falta ser héroe ni mártir, no cuesta dinero ni lleva más tiempo. Todo lo contrario. Si usted se escapa de ella va a tener un poco más de tiempo libre y mucho más dinero disponible. Lo difícil es sobrevivir afuera de ella sin morir de tristeza. Pero si usted se compra una botella de 600 ml de felicidad cada semana, puede resistir en la Permacultura por muchos años. Y si esa botella es de vidrio no va a acumular culpa.

Un comentario de “La Matrix

  1. S. Ignacio Martiren dice:

    Gran producción intelectual. Gracias. El final aún mejor, pero en vidrio y corcho natural, por supuesto básico, con moderación, claro.

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