Los ecologistas no somos todos iguales. Todos tiramos para el mismo lado pero con distinta intensidad. Cuando digo que una cosa contamina 10, y en realidad contamina 9 me estoy exponiendo al papelón. Le estoy dando al adversario un arma para usarla en mi contra. Claro está que entre 9 y 10 no hay gran diferencia, pero el adversario se va a encargar de usarla para desacreditarme usando esa palabra que usan ellos: «inexactitud» En el mundo real no existe la exactitud. Cuando protestamos por la minería. Tenemos dos motivos reales. Uno que estamos entregando los recursos nacionales y la salud de la población a una potencia extranjera, pero nuestra postura no puede ser nada o todo, porque esa es una posición débil. Pueden decir que estamos contra el «progreso» y contra las fuentes de trabajo y que no ofrecemos una solución alternativa. La solución alternativa es explotar las minas[Nota completa]